Retirados dos rottweiler que causaban temor entre vecinos de Daniel Hoyle

Su dueño menoscabó el trabajo y amenazó a los agentes ediles.

Dos canes de raza rottweiler que paseaban libremente en un parque de la urbanización Daniel Hoyle sin llevar collar, cadena ni bozal, tal como dispone la legislación sobre animales considerados potencialmente peligrosos, causando temor y preocupación entre los vecinos y transeúntes, han sido retirados esta mañana por agentes de Seguridad Ciudadana de Trujillo, quienes antes han tenido que soportar la actitud prepotente de su propietario, que ha menoscabado la labor de los uniformados, los ha amenazado y ha llegado a cerrar con violencia la puerta del vehículo edil que patrulla por la zona.

La intervención ha sucedido sobre las ocho de la mañana de este viernes, en el parque Los Cañones, ubicado en la urbanización Daniel Hoyle, en circunstancias del servicio de patrullaje preventivo que realizaban los agentes por el lugar, a bordo de un patrullero de Seguridad Ciudadana de Trujillo.

Momentos antes, los agentes habían sido alertados por la central de emergencias de Seguridad Ciudadana de Trujillo sobre la presencia de dos rottweiler que una pareja de esposos habían llevado al parque para hacer sus necesidades en el gras donde juegan los niños, tras lo cual comenzaron a desplazarse por todo el recinto, causando intranquilidad y temor, según denunciaron los vecinos a través del teléfono.

Lamentablemente, el propietario de los canes ha reaccionado con arrogancia, insultando y menoscabando la labor de los agentes, a quienes no solo ha amenazado con influenciar para que los saquen del trabajo sino con ir a buscarlos en su centro laboral para agredirlos, tras lo cual ha cerrado con violencia la puerta del patrullero de Seguridad Ciudadana de Trujillo, procediendo a retirarse sin recoger los residuos de sus perros, tal como le recomendaron los uniformados.

De acuerdo a la versión de los testigos, el sujeto, de apellido Orrego, que habría pertenecido al cuerpo policial municipal y vestía una camisa proporcionada por esta organización, la misma que ocultaba debajo de una casaca, todos los días suelta a sus perros en el parque y no hace caso a los vecinos que le reclaman por su actitud.